Este museo forma parte de los 52 museos pertenecientes al Ministerio de Cultura. Sus objetivos son preservar, estudiar y difundir el patrimonio arqueológico recuperado a través de las excavaciones de este antiguo santuario, que llegó a ser uno de los principales durante más de 1500 años de historia de la región. A este lugar llegaban peregrinos andinos para consultar al poderoso oráculo Pachacamac para que diere respuesta a sus inquietudes y solucionar sus problemas. El término quechua "pacha" significa "tierra" y "qamac" significa "alma", por lo que este lugar se consideraba antiguamente como "el alma de la tierra". La deidad Pachacamac era la principal de toda la religión costera. El museo es la antesala para ingresar a este recinto sagrado, el cual fue abandonado a la llegada de los españoles en 1533. La exhibición de objetos arqueológicos está dispuesta de forma temática y cronológica, comenzando con los objetos culturales más antiguos que datan de la fundación del recinto en el siglo II d.C. En el recorrido se pueden apreciar objetos pertenecientes a los distintos grupos prehispánicos que ocuparon este recinto, como los Wari, los Ychma e Incas. Algunos de los elementos más destacados son las piezas de cerámica del período Wari (700 - 1100 d.C.), el ídolo Pachacamac y el textil con representaciones de Spondylus, que servía de puerta de entrada a la cámara interior del Templo Pachacamac, denominado también el Templo Pintado. Este descubrimiento fue realizado por el arqueólogo Albert Giesecke en 1938. Museo de sitio del santuario de Pachacamac. |